 Cuenta regresiva del festival del cine independiente. Quedan pocas imágenes. Por supuesto, ya circula la versión propagandística de la versión minimalista de la revista “El Amante Cine” en su versión festivalera. Ya votan los integrantes de la revista y organizadores del festival, estrellas de sus propias apreciaciones, sus películas preferidas. Pero tratemos de esquivarlode nuevo. Volvamos a las imágenes. De acá y de allá. Clásicas y modernas.
Un respiro en momentos de tensión y desilusión electorales. Un poco de oxígeno, de un aire que no cambia el nuestro pero lo amplia, lo regenera. Diferentes lenguas, diferentes rostros y facciones, colores y estéticas, historias y búsquedas. Diferencias en un panorama de realidad tan igual a sí mismo, tan repetitivo y agotadoramente repetido.
Termina el festival, pero algo queda, circulando en la cabeza, resonando en los oídos.
No se trata de evasión, se trata de proyección. Se trata de cine.
La presencia de Claire Denis.
En este festival sin estrellas, se destacó la visita de la directora francesa Claire Denis, que vino acompañando a su última película “Vendredi soir” (Viernes a la noche).
Su primer film fue “Chocolat” (1988). En su pasado fue asistente de directores de la talla de J. Rivette, W. Wenders (en “París, Texas) y J. Jarmush. Dirigió, entre otras, “Beau Travail” (Bello Trabajo) (1999), “J´ai pas sommeil” (No tengo sueño) (1994), “Nénette et Boni” (1996) y “Trouble every day” (2001).
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